Desde hace algún tiempo, me he enterado que en varias
instalaciones en Suramérica y en parte de América Central (Chile y El Salvador,
por ejemplo) persiste el RPG III como lenguaje único para realizar nuevos
desarrollos. Esto se entiende cuando en algunos equipos no tienen incorporado
el RPG IV, el RPG Free ni el ILE. Otros
no tienen SQL ni DB2.
Sin embargo, hay varios centros informáticos que, teniendo
en el Iseries todas las herramientas disponibles para desarrollar sistemas de
una forma más sencilla y actualizada, se resisten a abandonar el RPG III en los
nuevos desarrollos.
Programadores más jóvenes que conocieron el Iseries y el
AS400 programando con RPG IV y que se han ido actualizando con las siguientes versiones de la plataforma, se
encuentran en las entrevistas de trabajo con una pared que les obliga a
obedecer a una tecnología más vieja a la cual deben someterse. Esta necesidad
de -hacer una carpa en RPG III y quedarse durmiendo allí- anula la posibilidad
de realizar desarrollos eficientes y de responder a la necesidad de información
de los usuarios y clientes de manera más rápida y oportuna.
En una experiencia personal que tuve hace un par de años se me pidió convertir
un programa de RPG II a RPG IV. Para ello solicité a los mas entrenados
programadores de RPG II que me enviaran el algoritmo del programa para
desarrollar el modulo en RPG FREE-ILE en base a dicho algoritmo.
Recibí en Word tres
versiones distintas del programa. Para mi sorpresa ninguna de ellas era un
algoritmo. No eran capaces de extraer el concepto detrás de la programación y
expresarlo en palabras. Repitieron el mismo programa con las mismas variables
en el documento Word que cada uno me envió. Había una notoria incapacidad de
extraer el concepto y la funcionalidad de las reglas de negocio formuladas en el
código de programación. Sencillamente fue
imposible hacer reingeniería del software. Este es el resultado del empleo del
cerebro en las mismas funciones repetitivas sin el interés de adiestrarse ni
entrenarse en otro tipo de soluciones: Quedaron encerrados en su propia
burbuja.
Desde mi experiencia, la preocupación principal en las
instalaciones que tienen Iseries o AS400 se centra en la necesidad de control
de los líderes de proyectos y desarrolladores que tienen años trabajando para
la misma empresa o tienen años programando de la misma manera.
Se puede observar cómo los programadores más jóvenes que se
encuentran aceptando, muy a su pesar, un
trabajo con programación exclusiva en RPG III, siguen enviando su Curriculum a otras empresas
para no “quemarse” en un trabajo que no da opciones de desarrollo profesional.
Esto ocasiona alta rotación de personal, costos de adiestramiento y costos sin
retorno para la empresa.
Los viejos líderes que se resisten al cambio muchas veces
tienen en sus manos el “know how” de la operativa de la empresa. Los directivos
que no entienden de tecnología y a quienes no les interesa complicar sus vidas
con estos detalles, resultan generalmente permisivos con estos líderes de la vieja
ola a quienes les conviene convertirse en indispensables. Estos profesionales que se
resisten al cambio no confían en sus propias capacidades para adaptarse a
nuevas tecnologías y tienen un miedo aterrador a quedarse sin empleo debido a
su edad. Por estas razones se han dedicado
a “hacer una cama” en la organización impidiendo que sus colegas puedan acceder
al conocimiento que tan celosamente guardan.
Administrativamente el poder se revierte en contra de los
directivos quienes terminan siendo rehenes de las decisiones caprichosas del único que sabe:
“que hay allí adentro”. Estos personajes que son empoderados por la negligente
supervisión de sus jefes, se convierten en unos capataces tiránicos que más
temprano que tarde ocasionan la renuncia del resto de los desarrolladores. (Recuerda
que cuando cierras la puerta a otros
eres tu quien queda encerrado del lado de adentro).
Mi intención con este artículo es motivar a mis colegas a salir de su burbuja y a adentrarse al
cambio. La programación es solo una herramienta operativa que debe obedecer a
la dinámica del negocio y a las funcionalidades que se desean implementar. Puede
que al principio parezca aterrador cambiar pero si tienen los conceptos claros
no importa la plataforma ni el lenguaje: el objetivo se logra.
Si estos profesionales no realizan un esfuerzo de su parte
quedaran fuera del mercado laboral así como los dinosaurios que se extinguieron del
planeta por no poder adaptarse a los cambios climáticos. Lo mismo puede
sucederle a la empresa para quienes trabajan. Lo que pasa por dentro de la
empresa termina manifestándose hacia los clientes y hacia el entorno
empresarial en el cual hay que competir.
Sin ninguna duda, adentro y afuera, tarde o temprano se
mostrará que el emperador está desnudo.
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Autor: Ing. Liliana Suárez